Ha sido una experiencia inolvidable y para contarla necesitaría mas de una vida entera. Y no es que crea, si no que ha sido y siempre seguirá siendo el mejor viaje de mi vida. Yo iba con una idea muy diferente, creía que no iba a ser tan bueno aquello y también tenia otra idea de las personas de allí.
Desireé, primera por la izquierda con una amiga de Larache y Lucía.
Pero me confundí, y al llegar a Marruecos, Tánger, y tuve contacto con las personas que nos esperaban quedé impresionada. Nos recibieron con el corazón enormemente abierto y nos trataron como si nos conocieran de toda la vida, como si fuéramos de su familia
Desireé, entre Victoria y Cristina. Se despieden de Omar y Mustafá, entre ellos Jesús. También en la foto: Lucía, Fernando, Gonzalo y Juana.
Nos invitaron a sus casas para merendar y nos prepararon unos pasteles exquisitos.
Lo que mas me gustó de ellos fue su hospitalidad, la forma de recibirnos, de abrir sus corazones hacia nosotros, y que lo mucho o poco que tienen te lo ofrecen.
Los diferentes paisajes de las diferentes ciudades que visitamos son increíbles, tienen un contraste maravilloso: la nieve, las montañas, los oasis, los palmerales... y lo mejor de todo ¡el desierto y sus dunas!
Nunca imagine estar allí, montar en dromedario y andar por sus arenas...
Las plazas de los diferentes lugares son inmensas, y puedes encontrar de todo a un muy buen precio, pero eso si ¡regateando!
Y su gastronomía es un poco diferente a la nuestra, aunque no se queda atrás, también tiene unos platos exquisitos.
Y algo que no se me puede olvidar y es algo que nos entretenía bastante eran sus bailes, su música y sus ritmos...
Y lo ultimo que es lo que menos me gusto y lo digo sin importarme fue cuando llego la hora de la despedida.
Nunca he vivido algo así, algo que nunca imagine, despedirme de los grandes amigos que he dejado allí y de este país encantador. Pero no me cabe la duda de que volveré a visitarlo y desde aquí digo que las personas que tengan la oportunidad de ir que no lo duden y que lo hagan. Y ya para terminar me gustaría darle las gracias a todas aquellas personas que han hecho posible este viaje como los profesores Rafael, Jesús, Adolfo, Cesar y Victoria.... ¡Muchísimas gracias!